La preocupación principal es la falta de conocimiento sobre la ingeniería social y su impacto en el uso seguro de la tecnología. Muchos usuarios abren correos y descargan archivos sin darse cuenta del peligro de los virus. Además, hay una tendencia a navegar por páginas web no seguras sin verificar la autenticidad, especialmente al buscar información financiera, lo que facilita el fraude cibernético. Se enfatiza la necesidad de una mayor educación en seguridad informática.